martes, 24 de febrero de 2015

Por fin me decidí, a por la Media Maratón de Latina 2015


Madrid, 22 de febrero de 2015, 9:30 horas


Es una de las carreras que comienza en mi barrio. Puedo acercarme andando, calentando, por la calle General Fanjul, hasta la zona de salida y desde que empecé a competir, hace cuatro años ya, me he resistido a correrla, solo porque todo el mundo añade la coletilla de “esta media es muy dura” al hablar de ella, y ha tenido que ser precisamente en su décima edición cuando me he decidido a conocerla.

Lo primero decir que está muy bien organizada, el trato al corredor es excelente, es de las pruebas que enganchan y al concluirlas sabemos que volveremos. Por la inscripción hemos pagado 13€, nos llevamos una camiseta técnica y una bolsa del corredor bastante completa, además durante la carrera hay parking gratuito en el Centro Comercial de Aluche desde las 7:00 horas. 


Tras correrla, puedo confirmar que sí se puede considerar de perfil duro.





A las 8:30 horas era el encuentro con los amigos en la explanada de la Junta Municipal de Latina: Ángel Sánchez (Contador de Kilómetros), Rafa Castillo, Raúl Rubio (Korrecaminos), Miguel Ángel Álvarez, Roberto Serrano. Los nervios todavía no han aparecido, entre risas, bromas y hablar de futuras carreras (principalmente el maratón de Barcelona, ya próximo, y el de Madrid), van pasando los minutos.


Qué bien conjuntados Carlos y yo en esta foto

Nos dirigimos a la calle Guareña para calentar y estar atentos para colocarnos en un buen lugar cuando se vaya acercando la hora del comienzo. Justo ahí nos encontramos con David Corbacho y vamos aumentando el grupo de los conocidos. 



Casi sin darnos cuenta anuncian que en tres, dos, uno.. tomamos la SALIDA.


Nos quedamos juntos David y yo, es curioso, justo los que somos de este barrio, al resto les vemos desaparecer entre los corredores, al girar en la calle Vidauba, en el Km1, ya no les localizo. Corremos tranquilos, quedan muchos kilómetros y hay que medir las fuerzas. En General Romero Basart, antes de llegar al Mercado de las Águilas, aparece Miguel Ángel, aquí nos hemos juntado los tres de San Ignacio de Loyola. Al acercarnos al Instituto de la Salle, descubro a Chema Beltrán, impensable no saludar a este veterano maratoniano. Veo avanzar a David y a Miguel Ángel, sé que en breve les perderé, tarde o temprano iba a suceder, cada uno que busque su ritmo.


En General Fanjul, Km2, con el sol dándonos de cara puedo asegurar que vamos a tener una mañana genial, incluso pasaremos calor, haber cargado con dos capas, la de debajo de manga larga, no ha sido buena idea. Al volver a pasar por delante del Centro Comercial me sorprenden los gritos de alguien en la acera izquierda, ahí está Nacho Cepero, saltando y dándome ánimos. Superamos el Km3.

Pasado el intercambiador de Aluche y justo ascendiendo la calle Valmojado, por el Km4, me saluda Carlos Alonso.

Subir el Parque de Aluche, la calle Sepúlveda, no tiene ningún misterio, es mi sitio habitual de paso hacia la Casa de Campo en los entrenamientos. En el Km6, mientras charlo con Luis Fernando, que no corre la media, si no que ha venido a animar y trata de llegar hasta el siguiente punto antes que sus conocidos, me atrapan los gritos desde el Parque de la Cuña Verde de Mai Rodríguez, y me dan energía para lo que vendrá después. Hasta el Km7, la carrera es asequible, llano, cuesta abajo, nos sirve para ir calentando bien las piernas.

A partir del Km9 va cambiando bastante el perfil. La subida de Batán duele, hay que bracear bastante para no perder el ritmo que llevamos.

Desde el Km10 tenemos un recorrido que los que solemos correr en la Casa de Campo conocemos bien: el Paseo de los Castaños y del Embarcadero… subida que se va haciendo más y más pesada, y aún no ha llegado ni la mitad de la Media. Seguimos por el conocido Paseo de los Plátanos y de los Castaños, tratando de no gastar todas las energías aún. En breve llegamos al último avituallamiento en el Km15, que a diferencia de los dos anteriores, bastante limpios, presenta una desastrosa carretera llena de vasos pisados, un tramo en el que debemos ir sorteando todos estos obstáculos sobre el asfalto mojado de bebida isotónica pegajosa.


El recorrido en la Casa de Campo transcurre en silencio, todos vamos reservando las fuerzas, solo se escuchan las pisadas, las respiraciones de los que llevamos cerca, la nuestra.

Poco después un tramo de subida y bajada común para los corredores, tan solo nos separa una cinta roja, puedo saludar a los compañeros que van delante, como Raúl Rubio, y a los que llevo a la espalda, como Chema Beltrán, muy concentrado en su carrera, sin prestar atención a mucho más.

Pasar el Km16, dejar atrás el Zoo significa que llega lo fuerte, el momento de centrarnos en subir y subir y no perder demasiado tiempo en este tramo, lo que creo que es bastante inevitable.

En el Km17, muy bien situado aparece el fotógrafo de la organización, para capturar las caras de sufrimiento, de tenemos que poder con esto y salir de aquí. Al descubrirlo decido no cambiar la expresión que llevo y saludarle o dedicarle mi mejor sonrisa, como es mi costumbre, creo que es mejor reflejar cómo corríamos realmente por ese tramo, por la Cuesta Aisa.

Foto de la Organización de la Media Latina

¡Qué ganas de volver a ver mi Parque de Aluche!, no porque sea fácil este tramo final, seguimos en subida constante, y justo corriendo el Km18, cuesta. Me comentan a la espalda si me han abandonado todos los amigos, ¡aún le queda reserva a Chema Beltrán para la guasa! Vemos cerca el cartel del Km19.

De nuevo un tramo por el que he pasado mil veces, paseando, corriendo, en transporte público, y tan diferentes las visiones en cada caso, hoy me parece aún más dura la zona, pasar el Intercambiador de Aluche, ascender y ver el Centro Comercial por tercera vez en la mañana, deseo dejar la calle Guareña a la izquierda y enfilar hacia el Polideportivo de Aluche, con un único objetivo, sacar todas las reservas, medir mis fuerzas y tratar de recobrar la velocidad perdida tras tanta cuesta mortal, aunque sea en unos metros, tener el apoyo de Anabel García tan cerca del final y que corra junto a mí unos minutos, ver la entrada al Polideportivo y que Pedro me grite que ya lo tengo, que se ha terminado, pero aún no, queda la entrada triunfal, ese paseíllo por la pista de atletismo, me atrapa un tonto deseo de acelerar, para ir dejando atrás a algunos corredores, que aunque no sirva de nada, me llena aún más de alegría, porque he podido con la Media de Latina, la dura, la de perfil desagradable, y atravieso corriendo tan rápido como puedo, en ese momento, esa META, ¡ni yo me lo creo!



Si pensamos en lo de que sin sacrificio no hay gloria, aquí tenemos una muestra, una carrera muy bien organizada, con un recorrido bonito que nos hace demostrarnos nuevamente de qué estamos hechos los corredores, y no es precisamente de postureo y llamativos colores, es del trabajo constante que hay detrás, que no se ve, pero si pudiésemos ponerlo en una imagen sería algo increíble.

Acabo de torear la Media de Latina,
y he conseguido superarla.
Me ha faltado una medalla, igual en otra edición se lo plantean

Desvirtualizar por fin a José Carlos Ojeda (Pepemillas). 


Volver a ver a Nacho Cepeda.


El reencuentro con el grupo de las 8:30 horas y poder darle un abrazo a Johnny y Raúl Hernández ponen el final a una gran mañana de febrero.



Hasta muy pronto a todos.

Saludos, abrazos, besos,

María Caballero

@MCG66Madrid













4 comentarios:

  1. Da gusto saber que se siguen organizando carreras a precios económicos y bien organizadas. genial esta crónica y el encuentro con tanta gente conocida. A Pepemillas sí tengo el placer de conocer, un histórico de los blogs.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Efectivamente, Gonzalo, tener carreras muy bien organizadas y que se preocupan del corredor siempre son de agradecer, si además no nos sangran con el precio hay que apoyarlas y tenerlas marcadas en nuestros calendarios.
      Y por cierto, nada masificada, 3000 corredores.
      Un abrazo

      Eliminar
  2. Una grata sorpresa coincidir contigo y poder saludarte en la fase final de la carrera.

    Un besazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Siempre es un lujo compartir carrera contigo, Raúl. Hasta la próxima, que espero que no tarde demasiado en llegar.
      Que todo vaya genial hasta el Mapoma.
      Un besazo

      Eliminar

Dame tu voto ¡Gracias!

Dame tu voto en HispaBloggers!

Contador Visitas